16 enero 2011

POEMA DE ISABEL MIRANDA MENÉNDEZ, ARGENTINA CON RAÍCES EN SALAS

Un sueño asturiano

Ya no quiero recordar

el triste y lejano día,

en el que dejando atrás

a mi madre , que escondida,

despedirse del hijo mayor

que partía, no podía.

Es que yo iba a emprender

un gran viaje, y no sabía

si volvería a verme o

de pena moriría.

A la Argentina llegué

y en la maleta traía

el sueño de aquí lograr

lo que América prometía.

Aquí prados no segaba

pero tarde me dormía,

pues luego de trabajar

catorce horas por día

yo en la cama recordaba

siempre, a diario, a mi familia,

mis amigos, los chavales,

las mozas, las romerías.

Al mate ni lo probé,

pues malas lenguas decían

que si yo tomaba mate

a Asturias no volvería.

Y gracias a Dios un día,

logré formar mi familia

ella, asturiana también,

dos retoños me daría,

y el sueño ahora cambió:

juntar a mis dos familias.

Tras once años soñando

se hizo realidad el día,

en que los cuatro llegamos,

al pueblin con alegría.

Allí no faltaba nadie,

mi madre en primera fila,

rezando agradecida,

mi padre, ya con bastón,

mi hermano con su familia,

los amigos de mi infancia,

...hasta la maestra, el cura

y el dueño de la botica.

Pero el pueblo, no era el mismo

muy pequeño parecía,

muchos se habían marchado

tras algunas utopías.

La panera olía igual,

las manzanas y la sidra

y en la cocina de leña,

las fabes, lento cocían.

Pasamos días felices

visitando a los parientes,

en las aldeas vecinas,

en los pueblos alejados.

Y casi la recorrimos a Gijón

de punta a punta,

pero al pasar por Somiedo,

el orbayo se acentúa.

Empezamos a estar tristes,

el viaje ya se termina,

y al llegar a la Santina

a ella le prometí

que en cuanto llegue

a Argentina

más duro trabajaré,

así regreso muy pronto

a la Asturias de mi ayer.

Pero transcurren los años, y esta tierra

ya no era, lo que en un principio fue,

pude educar a mis hijos,

y a sus hijos vi crecer,

pero el sueño quedó trunco

y al pueblo no regresé.

Tal vez muy pronto, algún día

mis nietos puedan lograr

los deseos heredados

... hasta la Virgen llegar

y agradecer de mi parte

haber nacido en Asturias.

...es el orgullo que tengo,

haber nacido asturiano.

Asturias Patria querida,

Asturias de mi querer,

por lo que resta de vida,

...yo siempre te añoraré.

Hola: soy Isabel Miranda Menéndez, vivo en Buenos Aires, mis padres fueron de Salas, y allí tengo a mi tía y primas...Un día, sin proponérmelo, me vino a la cabeza la primer frase, busqué una lapicera y un papel, y no podía terminar de escribir...Por suerte, son sólo versos, ya que mis padres volvieron a su terruño varias veces, yo inclusive fui en cinco oportunidades, y también mis hijos fueron a conocer la tierra de sus orígenes. El olor de la panera, fue una vivencia mía, ya que la 1º vez que fui (a conocer a mis abuelos), tenía 3 años y volví 20 años después y era el que recordaba....Mi papá un día, paseando por una hermosa glorieta en el Centro Asturiano de Buenos Aires, me dijo: "Estoy orgulloso de ser asturiano!" y el resto es el de muchos asturianos, que nunca volvieron a su tierrina o bien han podido lograr ese anhelo, tan sólo una vez....Espero les guste y si es posible me gustaría que lo publicasen en la página....Gracias....Cariños

Isabel